Confirmado. Mi sospecha siempre había sido que algún día iba a convertirme en una de esas "novias neuróticas" que miraba en discovery home & health (de paso les cuento, que es mi canal de televisión favorito, por no decir que es el único, ya que ODIO la tv)...
Y cuando hablo de neurosis, me atrevo a decir que recién es el comienzo de lo que pretende ser una Neurosis con todas las letras.
Pero paso a detallarles el porque de esta cuestión.
Sinceramente, la organización va muy bien. Tenemos el lugar -fundamental para luego empezar a organizar todo el resto de las cosas-. No les voy a negar que el ponernos de acuerdo sobre el tipo de lugar debíamos elegir costo un poco. La idea de no concordar con tu pareja resulta un poco frustrante, ya que el problema esta en lo que cada uno imagina como "su fiesta ideal" y es lógico que comiencen las diferencias.
Lo importante -creo- es priorizar el estilo que cada uno le quiera dar. Para N, por ejemplo, lo primordial era La Comida. Para él, el dicho "panza llena corazón contento" estaba a la orden del día. Obvio que tiene razón en un punto, el menú siempre es comentado en todas las celebraciones. Ya sea en tu cumpleaños nº 8, 15 o 60... Ni hablar en tus 15, 18, 21 o en tu casamiento!. Y todos sabemos que el ser humando es un "opinolo nato". Medicina, abogacía, turismo, economía, etc, etc, etc...
Entonces... sabiendo que si o si, se va a opinar con respecto al catering, no fue difícil entrar en razón con N de que no hace falta que los invitados exploten desde la recepción y llegasen a la mesa dulce sin ganas de ver ni una misera masa fina!
Les comento esto, ya que en varios lugares en los que consultamos presupuesto, sentí “literalmente” que el menú era lo único "realmente importante” de la fiesta. Frases al estilo “Tiene 50 platos diferentes para degustar! Continuamente bandejamos sin que la gente pueda quejarse que les falta comida!”, “No se preocupen que la bebida alcohólica es libreeee!, en toda la noche, nunca van a ver copas vacías”, “Nuestra recepción es única en buenos aires, no van a oír ninguna queja por parte de los invitados”… y la remataban nuevamente con “les comenté que la bebida alcohólica era libre… no?”….
De cada lugar, salía evaluando la situación y en todas me quedaba como conclusión:
“Primero la comida, la bebida y después… ah! Los que se casan”.
Que loco está el mundo! dejan de lado detalles sumamente importantes para una celebración de ese estilo. O será que yo voy al revés de todos…
Por eso, hable con N –que obviamente estaba embelesado con las propuestas que nos habían dado- y le comenté lo que pensaba. Que sentía que había otras cuestiones mucho más importantes y que debíamos seguir nuestros gustos y elegir lo que seguramente a "la gran mayoría" les iba a gustar... obviamente, sin dejar que los invitados “mueran de hambre” como nos planteaban aquellos. Y fue entonces, cuando encontramos el lugar PERFECTO.
Pequeño detalle, al tener el lugar, es cuando realmente comienza la "organización" del casamiento.
Porque... al reservar la fecha, es cuando realmente caes que vas a casarte, te decís “reservaron un día exclusivamente para nosotros” y les aseguro que se siente tan bien! pero a la vez, es como una cuenta regresiva en donde inconcientemente marcas día a día cuanto te queda para armar cada detalle. Les dije que me estaba volviendo media neurótica y seguramente estén diciendo “se nota” .
No se si es normal que me pase esto, pero sinceramente… Cuento los días y horas que faltan para el 2 de octubre -.-
Voy a tener que ir pensando en hacerme adicta al té de tilo… o simplemente dejar que crezca mi neurosis e intentar hacerme amiga.
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